Publicación: Aplicabilidad de la Acción Motríz para el Manejo de Problemas de Lateralidad en Niños de 4 a 5 Años del Colegio Cofrem de la Ciudad de Villavicencio
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Para comprender la existencia de los problemas de lateralidad, es importante entender cómo ésta tiene un significativo arraigo a la misma formación del ser humano desde el vientre, y cómo en el desarrollo psíquico, biológico y crecimiento del individuo es definida en la niñez es voluntaria y compleja la preferencia lateral y aun cuando se han detectado casos en los que unas acciones son zurdas y otras derechas, en algunos individuos; esto no es una regla única entre las dos lateralidades, por lo que estudiarla y actuar en la corrección de algunos desordenes genera la participación de varias disciplinas. La lateralidad, explicada de un modo sencillo, es la preferencia que muestran la mayoría de los seres humanos por un lado de su propio cuerpo. Los niños deben construir bien la lateralidad para tener un punto referencial espacio-temporal. Esta referencia es vital para automatizar los aprendizajes básicos, para organizarme interiormente y para organizar todo lo que le rodea. Si somos capaces de hacer que los sistemas audio-viso-motrices (oído-ojomano) de nuestros hijos se desarrollen correctamente no tendremos ningún problema, ni siendo diestro, ni siendo zurdo, pero si la maduración no es correcta, nos atreveríamos a diagnosticar muy pronto, que será un niño con dificultad escolar. Estos niños presentan problemas de atención y se fatigan fácilmente. Una buena organización lateral ojo-mano-pie-oído (mismo lado) favorece la resolución de problemas escolares y personales.