La calidad de vida es un factor de referencia para determinar los niveles de bienestar de una población en un espacio específico y con condiciones específicas. En este contexto, con la inclusión de personas con discapacidad al mercado laboral se busca que estas tengan mayor capacidad de desarrollo personal y con este una mejora en su calidad de vida satisfaciendo necesidades de empleo y autoestima, mediante la implementación de políticas públicas. El procedimiento que se siguió para la inclusión de personas con discapacidad al mercado laboral constó de un acercamiento a las empresas con la capacidad de contratar personal e informarles de las ventajas que se ofrecen a las empresas que vinculen empleados con discapacidad según la ley 361 de 1997.